Los milagros sí existen y uno de ellos ocurrió este martes en Minnesota, al norte de Estados Unidos.
Una pequeña cayó violentamente de un auto en movimiento junto a su silla de bebé en la que iba sentada, mientras su madre no se percató y seguía conduciendo. Por suerte, el suceso tuvo lugar luego de dar una curva, por lo que la conductora iba a poca velocidad.
Todo quedó recopilado por un camión que circulaba detrás del vehículo y que grabó toda la secuencia gracias a una cámara incorporada en la luna delantera. La menor sale desplazada junto a la silla, mientras el auto sigue circulando con la puerta abierta, la misma se cerró sola por el impulso.
Chad Mock, el conductor del camión, comentó: “La pequeña estaba muy tranquila, no lloraba y no parecía que estuviera herida, tampoco tenía ningún rasguño o sangre”. Chad paró el tráfico, agarró a la niña y la llevó a una zona segura, para solicitar ayuda a los servicios de emergencia.
Todo indica que la conductora no sujetó bien la silla en la que iba sentada la menor al vehículo, por lo que cuando dio la curva, la silla se movió y pudo caerse aprovechando que la puerta estaba mal cerrada. La conductora tardó 20 minutos en volver por la niña y ahora se enfrenta a una posible condena.
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