La situación de Patches era sumamente complicada, pero sin embargo los veterinarios pudieron lograr salvarle la vida.
Este perro salchicha de nueve años tenía un tumor cerebral que no paraba de crecer, por lo tanto era fundamental intervenir quirúrgicamente para evitar su muerte.
El tumor de este can comenzó a desarrollarse luego de sufrir un golpe en su cabeza, provocándole un bulto que se extendía dentro de su cráneo. Los veterinarios explicaron que sufría de un tumor osteocondrosarcoma multilobular, el cual había crecido de tal forma que pesaba demasiado para el tamaño de su cabeza y presionaba con fuerza su cerebro.
Para poder extirparlo completamente, los veterinarios debían eliminar aproximadamente el 70% de su cráneo.
La Dra. Michelle Oblak, oncóloga de cirugía veterinaria, junto a su equipo, mapearon la ubicación y el tamaño del tumor de Patches para luego trabajar con un ingeniero para crear un modelo 3D de su cabeza.
A partir de este modelo, los cirujanos pudieron empezar la cirugía incluso antes de ingresar al quirófano
Posteriormente, se llevó a cabo la operación con el animal, utilizando la pieza creada con impresión 3D, de manera que se ajustara perfectamente al cráneo de Patches.
Mediante este innovador procedimiento médico, lograron insertar la placa de titanio impresa, reemplazando la parte afectada del cráneo.
“El proceso que utilizamos para planificar e imprimir esta placa para Patches es el mismo método que se puede utilizar en el futuro en un humano en una situación similar”, dijo Oblak.
“La información que obtenemos del proceso de planificación e impresión, así como de los resultados en animales, se puede utilizar directamente para demostrar la viabilidad y validez de este método en un paciente humano”, añadió.
Actualmente Patches se encuentra libre de cáncer y los hallazgos de este desarrollo científico serán publicados en 2019.
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