Nada es más difícil que tener que decir adiós a un ser querido.
La pandemia y la crisis que ha generado el Covid-19 hacen esto todavía más doloroso. En ocasiones, hay quienes ni siquiera cuentan con la oportunidad de dar un último abrazo a sus familiares. “El proceso normal para superar un duelo ha sido totalmente alterado”, aseguró un rabino.
Actualmente, los ritos funerarios a duras penas pueden llevarse a cabo para cumplir con las medidas de seguridad y aislamiento social. Jim Harris es un anciano que se encuentra enfrentando la pérdida de Judy, quien fue su esposa por años. Todavía no han informado si Judy perdió la vida por Covid-19.
Está totalmente prohibido en la mayor parte del mundo llevar a cabo funerales convencionales o cualquier tipo de reunión con un gran número de personas. Esto afecta significativamente la manera en que Jim ha tenido que lidiar con su duelo. “Hay elementos durante el duelo que son muy necesarios, lamentablemente, ahora son imposibles: los abrazos, los besos y la cercanía de los miembros de la familia”, confirmó el director de una casa funeraria.
En cuanto llegó a una sucursal de All-States Crematorium en Colorado, recibió indicaciones de que debía retirar las cenizas de su esposa por medio de una ventana en el estacionamiento. Se trata del nuevo procedimiento que la empresa lleva a cabo para poder cumplir con la normativa del distanciamiento social. Luego de firmar unos papeles, Jim toma la pequeña caja de madera con lágrimas en los ojos.
“Estamos preparados para hacer los arreglos por canales digitales. Queremos ayudarlos a pasar este momento tan duro con todas las comodidades posibles”, aseguró un portavoz del crematorio. Un fotógrafo capturó el emotivo momento en que el afectado Jim toma las cenizas de su amada esposa.
Harris, al igual que otras familias tuvo que realizar todos los trámites por vía telefónica y utilizar equipos de protección para poder acudir al crematorio. Esperamos que este encantador anciano cuente con mucha fuerza para poder sobrellevar este momento tan doloroso.
“Es un dolor saber que ahora tendrá que seguir pasando los días de duelo sin poder abrazar a sus familiares por las normas del confinamiento. Me parte el corazón”, opinó un internauta. Nos unimos a todas las personas que han perdido a alguien en medio de esta difícil lucha contra el virus.
Es necesario permanecer en casa y dar lo mejor de nosotros para que todo esto pase lo más rápido posible. A pesar de las normas del confinamiento, siempre podemos llamar y mantenernos en contacto con las personas mayores para que no se sientan tan solos durante estos días.
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