Un “Lugar Daddy” y una “Sugar babu” comparten una relación que ciertamente no es completamente realista.
Para dar compañía y amor, los jugar babies exigen un subsidio a sus daddies, lo que se llama “un acuerdo en sus términos técnicos”. Los hombres o las mujeres brindan apoyo financiero a sus jóvenes parejas y, a cambio, disfrutan de su compañía y de su intimidad.
Valentina es una estudiante universitaria de 18 años que tiene SIETE Sugar Daddies. Hace no mucho salió en un documental de la BBC donde contaban todo sobre este tipo de relaciones.
Al explicar el acuerdo, Valentina dice: “La mayoría de los Sugar Daddies tienen más de 40 años, más del doble que la mía”.
La razón por la que se involucran con jovencitas o niñas de escuela es porque las mujeres de su edad ya tienen muchos problemas y también hay algo fantástico en nuestra juventud”.
Agregó que “estar con una niña los hace sentir jóvenes también. Existe esta felicidad que solo viene con un toque de juventud”.
Ella dijo que no negará tener relaciones íntimas con ellos porque esa es parte de una relación. Valentina confesó que la intimidad es como una relación normal y que lo disfruta tanto como ellos.
Ella dijo que, en promedio, una sugar baby cobra alrededor de 3 mil dólares al mes y además hay regalos adicionales, compras y paseos. Ella dice: “Cuando veo algo que me gusta, me vuelvo más coqueta y entienden que tendrán sexo a cambio de la compra.”
Además, tienen que ser glamorosas todo el tiempo con vestidos pop y joyas para salir con sus Daddies y estos vestidos se compran aparte.
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