La apariencia física no debería ser elegida por nadie más que tú mismo, como tampoco debería ser un motivo de discriminación al igual que la raza, la orientación sexual, ni ningún otro rasgo de nuestro ser es algo que hoy nos ha vuelto a recordar la actriz Rebel Wilson al confesar la razón que hay detrás de su pérdida de peso, que ya va por los 18 kilos.
La actriz asegura que se vio afectada emocionalmente por tener que mantener una determinada talla para los ejecutivos de Hollywood.
Además, insiste en que ahora está decidida a “trabajar también su lado mental” además del físico, a fin de mantenerse feliz y saludable.
En una entrevista con Sunrise, Wilson reveló que ahora aspira a bajar hasta los 75 kilos.
Lo que nos ha sorprendido a todos ha sido el por qué. Y es que Rebel Wilson no se ha puesto a adelgazar porque lo manden los actuales cánones de belleza, lo ha hecho justo por lo contrario: porque esos cánones la habían condicionado a ella para estar más gorda. Para ser más cómica le había tocado tener este rol, aunque su salud corriera peligro.
¿Es que no se puede ser graciosa sin más? Rebel es una de las actrices que más nos hacen reír, y, sinceramente, no creemos que sea por su físico. Su forma de actuar, gamberra, descarada, su valentía a hacer el ridículo, su talento para hacer lo que le dé la gana…
La australiana cumplió el pasado marzo 40 años, y este es un regalo que queria hacerse.
A finales del 2019 se puso en manos de expertos que la están asesorando para cuidar su cuerpo, y hacer una dieta controlada y sin peligro, aunque ha confesado que el confinamiento ha complicado esta tarea, y que ahora está feliz de poder entrenar más libremente.
A través de su Instagram ha ido mostrando su progreso, hablando de los buenos y de peores momentos, pero animando a todos a no rendirse ante las adversidades: “Incluso si tienes que gatear hasta tu meta, sigue adelante porque merecerá la pena.”
Su entrenador, Jono Castano Acero, ha compartido alguna rutina de entrenamiento en su cuenta de Instagram, y ha contado que se han centrado en disfrutar del entrenamiento y hacer que el cuerpo se mueva, y que ha ayudado mucho el gran sentido del humor de la intérprete.
Tomó esta decisión después de darse cuenta que no solo físicamente, sino emocionalmente estaba sufriendo al sentirse obligada a ser alguien que no creía ser y a tener sobrepeso para no perder su exitosa carrera.
Se ha marcado como objetivo bajar hasta los 75 kilos, pero en el fondo lo importante para ella no es llegar a un peso determinado, se trata simplemente de ser libre de estar como más a gusto se sienta y no como le digan que tiene que ser.