Cooper, un niño de 22 meses, hijo de Justin y Leanna, murió debido a la negligencia de su padre.
Justin partió para dejar a su hijo en la guardería. Se detuvieron en el camino y desayunaron mientras Justin conversaba con sus colegas, sosteniendo a Cooper en sus brazos. Después del desayuno, Justin se fue al trabajo. No dejó a su hijo en la guardería que estaba cerca de su lugar de trabajo.
El bebé Cooper perdió la vida atado en su asiento para el automóvil, puesto mirando hacia atrás dentro del auto de su padre, un SUV plateado. Ese día la temperatura subió más de lo normal y esto lo llevó a la muerte por asfixia.
Justin se había acercado a su auto no una, sino dos veces. La primera vez fue arrojar algunas bombillas en la parte delantera del automóvil y la segunda vez fue más tarde en la noche cuando condujo al cine para ver una película. Sin embargo, él afirma que no vio a su hijo al cerrar las puertas. Él jura que no recordaba tener al niño, de hecho Justin le había enviado mensajes de texto a su esposa Leanna preguntándole cuándo recogería a su hijo Copper de la escuela.
En el camino al cine, se detuvo en el estacionamiento del centro comercial donde se percató del niño en su asiento y sacó a su hijo sin vida. Los testigos dijeron que estaba confundido y perturbado ya que no podía creer que su hijo hubiera fallecido misteriosamente. Los extraños lucharon por devolverle la vida a Cooper, pero fue vano, ya no estaba.
La temperatura en el automóvil había aumentado a alrededor de 51˚C y Cooper no pudo sobrevivir. Justin dijo que se olvidó de dejarlo en la guardería. ¿Cómo podría uno olvidar a su único hijo en un auto? Justin juró a la policía que literalmente tenía un lapso de memoria.
¿Estaba escondiendo algo? ¿Vivía una doble vida?
Dicen que un ladrón tiene 40 días, bueno, los 40 días de Justin habían llegado a su fin.
La policía descubrió que había mentido sobre olvidar a su hijo en el automóvil. Se revelaron más secretos. Resultó que Justin no era un padre responsable ni era un esposo fiel. Estaba teniendo relaciones con muchas mujeres, incluida una menor.
Durante el día había estado enviando mensajes sexuales a estas mujeres en línea mientras su hijo estaba luchando por su vida, algunas de estas mujeres confesaron que les había mentido sobre su estado civil y edad. Uno de los mensajes que envió decía: “Amo a mi hijo y todo, pero ambos necesitamos escapar” ¿Qué quiso decir con esto? ¿Era su hijo un inconveniente? Aparentemente, Justin había visto un video de un veterinario que pasaba un tiempo en un auto caliente para ilustrar el peligro para los animales solo cinco días antes de la muerte de Cooper.
En octubre Justin Ross Harris fue acusado del asesinato de su hijo Cooper y arrestado. Por un lado, estaba la defensa que argumentó que fue acusado injustamente solo por asuntos sexuales e inmoralidad y, por otro lado, fue el fiscal que creía que era un ser humano despiadado que mató intencionalmente a su hijo por temor al compromiso familiar.
Sorprendentemente, su ex esposa Leanna, que se había divorciado de él antes del juicio, declaró en su defensa que era inocente y que no podía haberse atrevido a asesinar a su hijo porque él amaba al niño. Ella estaba muy desconsolada por la repentina muerte de su amado hijo.
Por fin, se hizo justicia. Justin fue sentenciado a cadena perpetua sin libertad condicional y recibió 32 cargos más, uno de los cuales fue enviar mensajes a una niña menor de edad. La ley consideró apropiado ponerlo tras las rejas para que pague por los crímenes que cometió y concluyó que Justin asesinó a su hijo a pesar del hecho de que afirma que solo lo “olvidó” en el auto.