El tiroteo ocurrió en Florida, y fue presenciado por otros cinco niños en casa.
Según los investigadores, la maestra de la niña escuchó discusiones y pudo silenciar la transmisión antes de que se sonaran los disparos fatales.
El sospechoso, Donald Williams, de 27 años, fue arrestado luego de huir en bicicleta.
Maribel Rosado Morales, de 32 años, fue asesinada frente a cuatro de sus hijos y dos primos jóvenes, según informes de la policía.
La niña estaba tomando su primer día de clases online después por la pandemia de coronavirus, siendo Florida uno de los estados más afectados de EE. UU. con más de 542.000 infectados.
En una conferencia de prensa, el alguacil dijo que Williams había ido a la casa para confrontar a su exnovia sobre un video de Facebook.
“La maestra”, dijo, “escuchó una conmoción, escuchó blasfemias, se dio cuenta de que era una especie de altercado doméstico”.
El sospechoso fue arrestado aproximadamente una hora después del asesinato.
“La maestra dijo que silenció toso para nadie oyera y luego vio que la niña de 10 años se llevaba las manos a los oídos”, continuó, y agregó que la pantalla se volvió negra inmediatamente después de la reacción de la niña.
Agregó que se encontró que una bala había impactado en la computadora.
El Sr. Williams huyó en bicicleta antes de abordar un autobús urbano. Después de que Williams exigió que el conductor lo llevara a un vecindario que no estaba en su ruta, el conductor llamó a la policía.
El Sr. Williams fue arrestado por un equipo policial que estaba entrenando en el área en ese momento. Según el sheriff, ya ha dado una “confesión completa”.
Ha sido acusado de asesinato, así como de varios otros cargos por delitos graves, incluido el ser un delincuente convicto en posesión de un arma. El alguacil dijo que también será acusado de robo a mano armada y allanamiento de morada a mano armada, y que puede haber sanciones adicionales debido a la presencia de niños durante el presunto delito.
El Departamento de Niños y Familias de Florida tendrá la tarea de encontrar nuevos hogares para los hijos de la víctima, que tienen entre 10 y 17 años, dicen los investigadores.
“Nuestro más sentido pésame y condolencias para la familia de la víctima, incluidos los niños presentes en el hogar que fueron testigos de esta tragedia desgarradora y sin sentido”.