¿Alguna vez has imaginado a alguien alimentándose de tu sangre mientras estás dormido de la manera más pacífica? Bueno, no, no estamos hablando de un vampiro hambriento que busca tu sangre.
Realmente no existen y espero que lo sepas. Aunque los hábitos alimenticios son similares, estas criaturas no lo son. Estamos hablando de las chinches. Las chinches son pequeñas criaturas cuyo tamaño puede variar de uno a siete milímetros. Estas pequeñas criaturas no son fáciles de detectar. Ellas chupan tu sangre cuando en su mayoría no eres consciente de su presencia.
Las chinches son criaturas pequeñas de forma ovalada que viven en un lugar cómodo como una cama, una silla espumosa, un sofá, etc. y se encuentran principalmente en superficies de lana y tela. Estos insectos pueden morderte mientras estás durmiendo y te dejan dolorosos efectos secundarios de la picadura. Aunque la mordedura no reacciona en todas las personas, sí reacciona en algunas, deja marcas oscuras e incluso ampollas a veces.
Una secuencia de video se viralizó desde Filadelfia. El video del teléfono móvil muestra miles de chinches que viven dentro de un asiento del autobús.
Una mujer de 56 años llamada Crystal Lopez viajaba en un autobús cuando de repente comenzó a sentir picazón en su brazo izquierdo. Miró su brazo para ver qué era y su brazo estaba completamente rojo. Parecía la marca de mordedura de las chinches. Fue entonces cuando vio que había miles de estos insectos chupadores de sangre que vivían en la brecha entre el asiento y la pared.
López informó rápidamente al conductor del autobús y no perdió tiempo. Él detuvo el autobús y todos los pasajeros salieron de él.
El video de estos insectos parásitos se viralizó rápidamente en Internet. El video muestra miles de chinches que se arrastran por el asiento del autobús donde López estaba sentada.
Estos insectos se alimentan de sangre y absorberían a sus presas sin siquiera hacer sentir su presencia.
Aunque los insectos no causan ninguna enfermedad grave, seguramente pueden causar problemas en la piel. La picadura de un insecto a veces puede inflamarse en el área y, a veces, puede producir erupciones. También puede causar inflamaciones y forúnculos en la piel de la víctima.
Las infecciones de la piel se pueden curar, pero seguro que causan dolor.
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