Fernando Balbuena murió cuando se tiró al tren que se aproximaba mientras su hija, milagrosamente, sobrevivía.

El padre suicida hizo una inquietante llamada a su esposa, Niurka Caraballo, momentos antes del incidente.

Luis Sánchez, un amigo de la familia, dijo que Carabello sospechaba que algo andaba mal cuando habló con Balbuena antes de que saliera de su apartamento con la pequeña Ferni de 5 años.

“Ella no podía entender lo que estaba diciendo”, compartió Sánchez. “Pero tuvo la sensación de que algo andaba muy, muy mal”.

Un policía dijo al New York Daily News que el padre le dijo a su esposa: “Adiós. Cuida a los niños”.

Luego de la llamada, Caraballo inmediatamente corrió a la estación y cuando llegó allí, se enteró de que su esposo se había lanzado a un tren con su hija en brazos.

Afortunadamente, la niña logró escapar físicamente ilesa de la tragedia.

Muchos viajeros vieron el aterrador momento en que Balbueno saltó a la plataforma con la niña.

Una de las personas que ayudaron a rescatar a Fernie, Jairo Torres, le dijo al Daily News: “Al principio estaba paralizado, como todos”.

“Pero luego salté… no lo hice para ser un héroe… fue un impulso”.

César Domínguez, otro testigo, se preparó para lo peor mientras miraban debajo del tren. Los dos cuerpos permanecieron inmóviles hasta que la niña se movió.

“Cuando movió la mano le dije gracias a Dios que está viva”, expresó Torres. “Me dije:“ ¡La niña está viva, la niña está viva!

“Fue lo primero que pensé, porque siempre hay un espacio entre el tren y la vía. Sabía en mi corazón que estaba viva”.

Torres permaneció en el lugar hasta que llegó la madre de la niña. “Ella me abrazó y me agradeció y lloró por supuesto”, dijo.

Caraballo le dijo al Daily News: “Médicamente, gracias a Dios, todo está bien, no tiene fracturas”.

Hablando de Balbuena, quien fue declarado muerto en el lugar, Caraballo dijo: “No es una mala persona. No sé qué estaba pasando por su mente en ese momento, pero él no es así. Amaba a su niña”.

Nunca sabemos qué tipo de desesperación viven otros, aun cuando nos dan su mejor sonrisa.