Amanda Coats es una mujer australiana de 44 años que fue a un centro de estética para realizarse un microblanding, un tratamiento para rellenarse o pigmentarse las cejas.
Desafortunadamente, al día siguiente, se miró al espejo y notó que tenía hinchada y roja esa zona. La mujer contrajo una infección que le provocó terribles heridas y la pérdida total de sus cejas.
Amanda Coats/Facebook
El procedimiento al que se sometió consiste en realizar pequeños cortes en la piel antes de introducir la tinta en las cejas para que parezcan más oscuras y voluminosas.
“Nunca me había hecho este procedimiento así que no sabía qué esperar. Estaba muy asustada. Al otro día me levanté y mi piel se había caído en mi almohada. Estaba roja e hinchada.”
Amanda Coats/Facebook
“Fui al médico inmediatamente por el dolor. Sentí que alguien se estaba comiendo mi piel“, declaro Coast.
Amanda Coats/Facebook
Por parte de la clínica estética, aseguraron que le reembolsarán el gasto del microblanding. Sin embargo, Amanda está preocupada por las cicatrices que le quedarán.
Amanda Coats/Facebook
Con el fin de alertar a otras personas, la mujer decidió contar su experiencia. Ella declaró que las condiciones higiénicas de la clínica no eran las más apropiadas ya que el mismo doctor estaba realizando otro trabajo a la vez.
Pero desde la clínica dijeron que “probablemente le dio alergia la tinta o que no siguió bien los consejos del doctor, ya que ellos cumplen con los reglamentos de salud”.