Una niña de 11 años de edad, se levantó en una funeraria cuando la estaban limpiando para embalsamar, después de haberla declarado como muerta.
“Su temperatura subió de repente, sus ojos cerrados se abrieron súbitamente y notamos que su corazón volvía a latir”, declaró su padre a un medio local en la ciudad de Probolinggo, Java, Indonesia.
Después de ver el milagro, llamaron a una ambulancia, un equipo de médicos se desplazó hasta el lugar e insufló oxígeno a la niña, pero al cabo de una hora falleció (otra vez), acondicionaron su cadáver y la enterraron. La prensa local estima que pudo ser un síndrome de Lázaro, generado por el retorno espontáneo de la circulación sanguínea en una persona momentos después de que fallara su reanimación cardiopulmonar.
Este raro fenómeno fue descrito por primera vez en el año 1982, suele suceder en los 10 minutos siguientes al presunto fallecimiento y hasta 2007 sólo se detectó en 35 pacientes, de los cuales 13 sobrevivieron. Este incidente ocurrió el pasado 17 de agosto del presente año.
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