Una mujer mexicana de 24 años recientemente pasó por una experiencia inimaginable.
Su estómago se hinchó tanto que parecía estar embarazada de 10 niños. Todos le decían que iba a tener muchos hijos, pero la verdad era totalmente diferente, y además más aterradora.
* Se recomienda discreción ya que el siguiente artículo contiene imágenes que pueden ser molestas para algunos lectores.
Con el tiempo, su situación empeoró tanto que se volvió incapaz de caminar, comer e incluso respirar. Al ver esto, la mujer ingresó en el Hospital General de México.
En el hospital, el Dr. Erik Hanson Viana supuso a primera vista que algo no estaba bien. Envió a la chica de 24 años para escaneos y cuando los resultados estuvieron listos, se dio a conocer una verdad extremadamente aterradora.
Los escaneos mostraron un quiste ovárico gigante en el vientre de la mujer. El quiste, que más tarde se encontró que pesaba unos increíbles 33 kg, había comenzado a comprimir gravemente dos de sus principales vasos sanguíneos.
“Era tan grande que ocupaba el 95 por ciento del abdomen de la paciente”, dijo el Dr. Viana en una entrevista.
El quiste ponía en peligro la vida de la mujer y había muchas posibilidades de que sufriera un ataque al corazón en cualquier momento. Es por eso que se realizó cirugía de inmediato.
Los cirujanos tenían dos opciones, podían drenar lentamente el quiste de líquido y luego llevar a cabo una operación para eliminar los restos, o podían extirparlo por completo llevando a cabo una cirugía extremadamente arriesgada.
Aunque la última opción era definitivamente más arriesgada y también dejaba una gran cicatriz en su cuerpo, la mujer optó por eso.
“Quitarlo por completo también es difícil, ya que la pared del quiste es menor a 1 milímetro y se debe evitar que se seque, de lo contrario podría romperse fácilmente”, explicó la Dra. Viana.
Y dado que alrededor del 20 por ciento de los quistes gigantes son de naturaleza maligna, incluso una microgrieta podría haber terminado con la propagación de las células tumorales en su cuerpo.
Pero los cirujanos ejecutaron perfectamente la operación riesgosa y el quiste se eliminó de forma segura sin complicaciones serias. Después de la operación, el estómago de la mujer volvió a su tamaño normal.
Sorprendentemente, la mujer de 24 años pudo irse a casa justo después de dos días de cirugía, y 33 kg más ligera.
Después de seis meses, la mujer visitó el hospital para un control de rutina. Afortunadamente, podía caminar como cualquier persona normal, sin la necesidad de muletas ni ninguna otra ayuda para caminar. Estaba tan sana como siempre, gracias a los increíbles doctores.
Es realmente impresionante lo que el equipo de médicos dirigido por el Dr. Viana pudo lograr. Ciertamente merecen algo más que palabras de agradecimiento por salvar la vida de esta mujer.
Hablando del asunto, por favor nunca ignores los más mínimos problemas de tu cuerpo. Si alguna vez sientes que algo no está bien, ¡es mejor buscar la ayuda de un médico!