Los pasajeros de un avión horrorizado se vieron obligados a sentarse junto a un cadáver en el pasillo durante tres horas después de que una mujer murió en el aire durante un vuelo a casa después de unas vacaciones en Turquía.
La víctima de 50 años era diabética y se cree que dejó su medicamento en su equipaje documentado.
Según los informes, la mujer, que no ha sido nombrada, murió 45 minutos despues de despear en un vuelo de Azur Air desde Antalya, en el sur de Turquía, a la capital rusa Moscú.
La tripulación de cabina a bordo pudo hacer poco para ayudar a la víctima, que no llevaba insulina con ella.
Según el esposo de la mujer, que tampoco quizo dar su nombre, ella eligió mantener el medicamento en su equipaje facturado porque había recibido una inyección de insulina solo una hora antes del vuelo.
Ninguno de ellos anticipó que su condición empeoraría repentinamente, dijo.
Las azafatas tomaron la decisión de acostar a la víctima en el pasillo y la cubrieron con una manta.
El capitán del vuelo también decidió volar directamente a Moscú en lugar de hacer un aterrizaje de emergencia
Se cree que la mujer sufrió insuficiencia cardíaca aguda.
El evento de una muerte en el medio del vuelo es de poca probabilidad cuando se tiene en cuenta la gran cantidad de pasajeros diarios, pero las principales aerolíneas generalmente tienen planes para enfrentar tales tragedias inesperadas.
A algunos tripulantes de cabina se les ordena, por ejemplo, mover al difunto a filas vacías en las secciones de primera clase o clase ejecutiva del avión, mientras que los aviones más grandes incluso están equipados con un “armario de cadáveres” para que los asistentes de vuelo puedan mantener el cuerpo fuera de la vista.
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