El fiscal general, Francisco Barbosa, desde Cali, confirmó en este mediodía que los siete militares involucrados en el caso de violación de una niña indígena de 13 años aceptaron los cargos, seis de ellos como participantes activos y el otro como cómplice.
El Fiscal señaló que se solicitó medida de aseguramiento en sitio de reclusión para los militares, quienes fueron sindicados de acceso carnal violento con menor de 14 años agravado.
El fiscal Barbosa Delgado sostuvo que la judicialización de los responsables del hecho, que calificó de “repugnante y doloroso para los colombianos”, se logró en tiempo récord.
“A estos bandidos que mancharon su uniforme y mancharon la dignidad de la niñez en Colombia, se les solicitó medida de aseguramiento en centro carcelario por la gravedad de los hechos”, dijo el jefe del ente acusador.
A estos bandidos que mancharon su uniforme y mancharon la dignidad de la niñez en Colombia, se les solicitó medida de aseguramiento en centro carcelario por la gravedad de los hechos
Barbosa indicó que se recolectaron más de 40 elementos probatorios en el caso.
Añadió que seguirán priorizados los delitos contra los menores de edad para garantizar que avancen más rápidamente.
“No vamos a ceder un ápice en la defensa de los menores de edad”, indicó el funcionario.
Aunque aceptaron los cargos, no tendrán reducción de pena por tratarse de una menor.
Juan de Dios Queragama, gobernador del resguardo Gito Dokabu–embera katio, denunció el caso de abuso sexual y señaló que la víctima hace parte de la comunidad embera chamí.
La denuncia sobre la presunta violación originó el rechazo de la sociedad, desde el presidente Duque, quien llegó a señalar que “si con estos militares toca estrenar la cadena perpetua, lo haremos”.