Podríamos decir que es un acosador profesional
George Coughlan descargó 67 videos del circuito cerrado de cámaras de vigilancia de la casa de su víctima. A la mujer le envió cientos de mensajes abusivos e investigó cómo rastrearla y acceder a sus cuentas.
Envió a su víctima un video de ella relajándose en su propia sala de estar. Después de que lo atraparon, la policía encontró otros 67 videos descargados de su CCTV. El acosador también había utilizado 61 cuentas de redes sociales para acosar a la mujer, enviándole amenazas.
Durante su investigación, la policía encontró que Coughlan había buscado frases como ‘iniciar sesión en iCloud sin verificación’ y ‘rastreador de teléfono móvil gratuito sin que el usuario lo sepa’ en Internet.point 328 |
También había investigado software espía para rastrear mensajes SMS, llamadas, etc.point 76 | aplicaciones sociales y movimientos GPS y el nombre de su víctima y su pareja.point 142 | 1
El acosador envió cientos de mensajes aterradores a su víctima. Y después de que la mujer bloqueó su cuenta de redes sociales, utilizó otros perfiles para seguir comunicándose con ella.
Coughlan se declaró culpable de acoso, que involucró alarma grave y angustia, y se le entregó una orden de restricción de cinco años que le prohíbe comunicarse con la víctima, además de su sentencia de cárcel.point 300 |
El acecho es un delito grave, una invasión de la privacidad de alguien y, como hemos visto con este caso, puede resultar en una pena de cárcel significativa.point 132 | 1
“Coughlan hizo todo lo posible para ejercer control e inmiscuirse en la vida de su víctima. Era muy perturbador y ella vivía día a día con miedo… no es aceptable”.
El tribunal de Wolverhampton condenó a George Coughlan a 21 meses de cárcel y le impuso una orden de restricción de cinco años .
“Las redes sociales y la tecnología de fácil acceso, como el software espía para rastrear teléfonos móviles, están dando a los acosadores más herramientas para acosar a las víctimas y potencialmente ponerlos en mayor peligro”.
“En el último año hemos visto que los informes de acoso aumentaron en casi un tercio. Gran parte de eso es a través de Internet y esa tendencia continuó durante la cuarentena a medida que las personas pasaban más tiempo en las redes sociales”.
“No diferenciamos entre personas que abusan o acosan a otras cara a cara o por Internet: sigue siendo una ofensa y tomaremos medidas. Deseamos lo mejor a la víctima mientras continúa reconstruyendo su vida después de esta traumática experiencia”.
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