La sorprendente historia del empleado que salvó la vida de una chica por escribir una palabra en un café

Un empleado escribió una simple palabra en el vaso de una chica y la salvó la vida.

 A veces los pequeños detalles pueden lograr cosas sorprendentes, como sucedió en esta historia.

Bekah Georgy es una chica que se encuentra en plena adolescencia, radica en New Hampshire, Estados Unidos. Su vida no ha sido sencilla, ya que enfrenta varias enfermedades como depresión y anorexia. Tiene un gran futuro como bailarina, pero sus enfermedades la llevaron a pensar en el suicidio.  Ella mencionó:

“Me miras y ves a una persona alegre, sociable y alegre. Pero no soy yo misma. Mi sonrisa no es real. Es una máscara que esconde a la persona que se rindió y se odia a sí misma”.

Bekah estaba hundida en sus pensamientos suicidas y una tarde decidió meterse a un Starbucks. Ya que ha mencionado que le encanta el café porque despeja su mente.

La chica pidió una bebida helada y el hombre que la atendió en vez de escribir su nombre en el café, puso “Sonríe”. Este gesto, que para muchos podría parecer absurdo, cambió su vida. 

Ella se conmovió tanto que decidió escribirle unas palabras:

“Acabas de hacer solo tu trabajo. ¿Pero sabías que una palabra podría cambiar mi día y tal vez toda mi vida? Estoy agradecida por lo que hiciste. Pudiste tratarme a mí como a todos los demás clientes. Pero encontraste tiempo para compartir tu bondad”.

Bekah recuerda que ese día no fue nada bueno para ella, pues tuvo una sesión de terapia y una cita con el médico.

Ella día con día se esmera en tener una mejor calidad de vida, pues no falta a sus terapias y revisiones médicas, sin embargo, a veces no logra soportar su entorno. La adolescencia es una etapa complicada, pero seguramente con esmero logrará seguir adelante y convertirse en una gran bailarina.

Los pequeños detalles, a veces pueden hacer grandes cambios, ¿no te parece?

Actualmente ella recauda fondos en GoFundMe, ya que no cuenta con los recursos para seguir pagando su asistencia médica. Al respecto, mencionó:

“Me siento culpable. Probablemente, no merezco una donación. Pero realmente quiero vivir. Estaré agradecida si me ayudas. Y luego haré todo lo posible para salvar otras vidas”.

Le deseamos lo mejor a esta chica.