La escarlatina, es un tipo de infección que se desarrolla en individuos que tienen una faringitis estreptocócica.
Esta enfermedad está marcada por una erupción de color rojo brillante en todo el cuerpo junto con dolor de garganta y fiebre alta.
Esta enfermedad afecta a niños que tienen entre 5 y 15 años de edad. Public Health England informó que en 2018, el número de casos de escarlatina ha aumentado. En la última semana de enero, se informaron alrededor de 735 casos. Es más probable que estas infecciones ocurran durante la temporada de primavera o invierno. Por lo tanto, se espera que el número no aumente considerablemente a medida que transcurra el año.
Con el avance en el campo de la medicina, los antibióticos han tenido éxito en la reducción de los efectos de esta enfermedad.
Pero las bacterias se están adaptando y evolucionando. Según un informe publicado en Kid’s Health, la bacteria responsable de la faringitis estreptocócica libera una toxina en el cuerpo del individuo infectado que se transforma en escarlatina.
Las erupciones se forman en la cara, el pecho, el cuello y la espalda. Estas erupciones son similares a las quemaduras solares.
Los síntomas de la escarlatina incluyen dolor de garganta, erupciones rojas, dolor abdominal, picazón en la piel, escalofríos, piel pálida alrededor de los labios, lengua de fresa, fiebre alta, inflamación de los ganglios del cuello y cara enrojecida.
Esta fiebre es contagiosa, así que asegúrate de que tus hijos estén alejados de los que padecen esta enfermedad. Incluso un estornudo o tos es suficiente para transmitir esta enfermedad.
Algunos consejos que pueden ayudar a combatir la escarlatina son la aspirina, el ibuprofeno, los antibióticos, etc. Para tratar el dolor de garganta, puedes intentar comer un helado o tomar una sopa caliente en lugar de tomar medicamentos. Para minimizar el dolor de un dolor de garganta, puedes intentar hacer gárgaras con agua con sal.
Es muy importante lavarse las manos regularmente y mantenerse hidratado todo el tiempo. Debes asegurarte de que la bacteria no se propague a otras partes. Cúbrete la boca mientras toses o estornudas y no comparta ningún utensilio con nadie.
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