Keanu Reeves es uno de los actores más queridos en Hollywood.
Los fanáticos lo promocionan como uno de los mejores actores en el negocio.
El medio Insider incluso ha enumerado 13 razones por las cuales el actor es la “mejor persona de la historia”. Esta lista incluye todo, desde ser respetuoso con sus admiradores, y frecuentemente posar para fotos y firmar autógrafos para ellos hasta gestos aleatorios de amabilidad, como renunciar a su asiento en un concurrido tren subterráneo, hasta donar en secreto grandes sumas de dinero a hospitales infantiles.
No muchos sabrían que alguien tan dulce como Keanu podría tener un pasado desgarrador. El hombre de 55 años ha sufrido tantas pérdidas trágicas: su mejor amigo, su novia e incluso su pequeña hija.
En 1993, su mejor amigo River Phoenix, hermano de Joaquin Phoenix, murió de una sobredosis de drogas a la edad de 23 años, informa PEOPLE . Mientras se curaba de esta perdida, unos años más tarde, conoció a Jennifer Syme en 1998 en una fiesta, y los dos comenzaron a salir en breve.
La joven actriz era ocho años más joven que Reeves. Un año después de su relación, la feliz pareja se estaba preparando para el nacimiento de su hija, Ava, informa el medio Fabiosa. Pero su felicidad duró poco cuando Syme dio a luz a su bebé sin vida en la víspera de Navidad en 1999. Poco después del trágico funeral del bebé, Jennifer y Keanu se separaron y sanaron individualmente.
A pesar de la ruptura, Reeves y Syme siguieron siendo mejores amigos hasta abril de 2001. Pero ese no fue el final, ya que Reeves sufrió otra gran pérdida: Syme murió en un accidente automovilístico.
Colbert le preguntó al actor John Wick . “¿Qué crees que sucede cuando morimos, Keanu Reeves?” Reeves respondió profundamente: “Sé que los que nos aman nos extrañarán”. Todos en la sala quedaron sin palabras.
Por supuesto, la respuesta llegó con el peso del trágico pasado de Reeves, y tocó a todos los que lo escucharon.