Algunos humanos tienen un alter ego, pero en el caso de Tom Peters, su alter ego ha ido a un nivel completamente nuevo… y esta podría ser la razón por la que Rachel Watson canceló su compromiso con él.
Rachel descubrió el gran deseo de Tom de llevar una vida de perro… literalmente.
Fue una revelación impactante, pero Rachel dice que solo la ha hecho sentir más cerca de Tom. Aunque ahora una boda parece una idea descabellada para ella.
Tom dice que su deseo de vivir como un perro no tiene nada que ver con ningún tipo de fantasía sexual, sino algo que lo hace sentir cómodo. Los médicos dicen que se trata de una especie de Licantropía Clínica o, en otras palabras, un síndrome psiquiátrico que hace que el afectado se convierta en un animal distinto al humano.
El estado civil de Tom y Rachel es complicado, pero prefieren llamarse “amigos”. Tom y Rachel fueron invitados al programa de ITV para su documental: La vida secreta de los cachorros humanos.
Tom apareció en el documental y Rachel dijo que el programa la ha ayudado a comprender mejor a personas como Tom. Y que hay otros que también padecen este raro síndrome psiquiátrico.
El documental presentó a personas de esta comunidad oculta a quienes les encanta disfrazarse de perros y explorar sus fantasías. En el documental, se descubrió que cada ser humano que sufre de Licantropía Clínica tiene necesidades diferentes, no todos son iguales.
Algunos de ellos pueden calmar sus impulsos en el dormitorio y, en el caso de Tom, desea un fuerte requisito de compañía. Cuando Tom no está caminando y jugando como un cachorro, trabaja para una compañía de teatro local como su técnico de sonido e iluminación.
Hace más de una década que desarrolló este alter ego para comportarse como un perro en su tiempo libre. Gastó más de $4.000 dólares en su equipo para cachorros para que sea cómodo y compatible cuando lo usa un humano.
Por las noches, a Tom le gusta pasar algún tiempo en su jaula y su obsesión ha llegado tan lejos que incluso usa las cápsulas de entrenamiento para perros cuando está dentro de la jaula. Los usa para hacer sus necesidades cuando está en una jaula. Ha adoptado totalmente el estilo de vida de los perros.
La versión perruna de Tom se llama “Spot” y cree que Spot es su verdadera personalidad y Tom es solo una máscara. El fenómeno humano-perro se está imponiendo realmente en el mundo y la cultura entera está evolucionando gradualmente.
Las personas con un alter ego de perro también tienen los llamados “manejadores” al igual que los perros reales, estas personas también tienen manejadores. Para Tom, Collin es su manejador. Collin y Tom no están saliendo, su estado civil se limita a “amigos”. Collins dice que solo lo hace porque ella y Tom son buenos amigos. Tom no quiere nada íntimo con Collin, solo le gusta que ella sea su manejadora.
Tom afirma que vivir su formato de alter ego actúa terapéuticamente para él y lo ayuda a aliviar el estrés. Rachel, por otro lado, dice que está feliz de tener un amigo como Tom, pero que nunca volverá a ser como antes.
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