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Hombre Tropieza Y Rompe Una Escultura Por Tomarse Un Selfie Dentro Del Museo


En ocasiones, el hombre es el peor enemigo del arte, como hemos visto en varias ocasiones, pues jamás falta quien lo arruina por andar de gracioso, justo lo que pasó con este hombre.

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Resulta que hace algunas semanas en el Museo de Possagno en Italia, sucedió una desgracia. Un turista de origen austriaco destruyó una obra de más de 200 años de historia y como podrán imaginarse, fue por tener un bello recuerdo de su recorrido por ese lugar, el cual reúne la gran mayoría de las esculturas del artista Antonio Canova, figura clave del movimiento neoclásico de la pintura italiana.

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Todo ocurrió, cuando el hombre se encontraba turisteando por el museo junto a un grupo de personas. Todo iba normal hasta que de pronto se le ocurrió la grandiosa idea de tomarse una foto para presumirla en sus redes sociales. El problema no era que se sacara una selfie, lo grave fue que se sentó sobre una escultura y le rompió dos dedos.

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Al darse cuenta de lo que había hecho, se fue del museo sin declarar nada y minutos más tarde los guardias de seguridad se percataron de lo que había pasado, y aunque este turista pensó que ya se había librado, por supuesto que las cosas no se iban a quedar así.

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Gracias a las cámaras que hay dentro del museo y al registro de visitantes, pudieron identificar al turista culpable de destruir la obra de Antonio Canova. Al enterarse de que era noticia en su propio país por lo que había hecho en Italia, no le quedó de otra más que entregarse, aceptar su responsabilidad y disculparse por lo ocurrido.

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Por ahora, no se sabe qué pasará con este turista, pues su caso se encuentra en la fiscalía italiana y las autoridades están evaluando su situación. Pero hablando de la escultura mutilada, el Museo de Possagno informó que en las próximas semanas hablarán con los expertos que hay en todo el país para buscar restaurarla.

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La obra que este sujeto rompió es el modelo previo en yeso que Antonio Canova utilizó para esculpir en 1805 en mármol la “Paolina Borghese” (también conocida como “La Venus Victoriosa”). Este es un retrato de Paulina Bonaparte, hermana de Napoleón, en el cual el artista la idealiza como la diosa Venus acostada en un lecho.

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