El horrible crimen sucedió en la colonia Vallejo de la alcaldía Gustavo A Madero en la Ciudad de México, concretamente en el apartamento 501 del número 258, en la esquina de las calles Tamagno y Schumann.
El feminicida era su pareja sentimental, un sujeto identificado como Francisco de 46 años de edad, e ingeniero civil de profesión, quien declaró tener un hijo en común con la víctima.
Francisco comentó luego de ser detenido que tuvo una fuerte discusión con Ingrid Escamilla por un tema de celos y que ella lo atacó con un cuchillo, tras lo cual, dijo, “tiene el diablo adentro” y la asesinó.
Por miedo y vergüenza, el asesino descuartizó a la joven para tratar de ocultar lo que había hecho, deshaciéndose de las vísceras de Ingrid por la tubería y tirándolas a unas calles del apartamento.
Reportes policíacos informaron que el sujeto fue interceptado por un agente cuando regresaba al lugar del crimen luego de deshacerse de una bolsa con los restos de su mujer.
Al parecer una llamada telefónica de una mujer de nombre Ivete, quien se identificó como la ex pareja de Francisco, fue la que informó a las autoridades sobre el feminicidio.
Cuando la policía vio a Francisco, cubierto de sangre, este confesó que había asesinado a su esposa, lo que momentos más tarde sería confirmado cuando fue hallado el cuerpo descuartizado junto a un cuchillo.
El hombre declaró ser de Puebla y que la familia de ella vivía en Ecatepec, Estado de México, quienes reciben asesoría psicológica y legal por parte de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina.
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