Marco Lavoie, de 44 años de edad, asesinó y se comió a su pastor alemán luego de que un oso le destruyera la canoa en la que viajaba y echara a perder todas las provisiones de alimentos que llevaba para su viaje en lo salvaje.
Lavoie estuvo perdido durante tres meses en medio del bosque a casi 800 kilómetros de Montreal, en Quebec.
El pastor alemán de Lavoie ahuyentó a un oso que había destrozado las provisiones de su amo y le salvo la vida. Lamentablemente, Lavoie se vio obligado a acabar con su fiel mascota luego de pasarse tres días sin encontrar nada que comer. A pesar de la dura decisión varios expertos en supervivencia han elogiado la fortaleza del excursionista por haber sabido reaccionar en una situación tan extrema.
Según expertos en el congelado clima del norte canadiense las fuentes de comida son escasas. Lavoie había perdido casi la mitad de su peso corporal cuando fue rescatado cerca del río Nottaway. El sujeto que se encontraba agonizando solo alcanzó a pronunciar una frase: “Quiero otro perro”.
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