James Brewer, nunca imaginó que liberar su conciencia le iba a salvar la vida por completo.
Estaba totalmente convencido de que se encontraba en sus últimos instantes de vida, luego de sufrir un terrible derrame cerebral.
El americano llamó de inmediato a la Policía, para confesar que fue el causante de la muerte de su vecino de 20 años de edad, hace ya 32 años que, al parecer, había intentado seducir a la mujer de Brewer y por eso le quitó la vida.
Con lo que no contaba el asesino, es que tras luego de su confesión se recuperaría.
Actualmente, se enfrenta a la pena de muerte por un asesinato no resuelto en el estado de Tennessee hace 32 años.
Después de todo, iba a perder la vida igualmente. Deja tu respuesta en los comentarios y COMPARTE la noticia.