El chico de 17 años fue encontrado muerto después de desaparecer durante 8 días.
Eran las primeras vacaciones del alemán Mike Mansholt sin padres.
Sin embargo, mientras se divertía en Malta, el adolescente desapareció de repente. Ocho días después, su cuerpo fue localizado y su caso desconcertó a los investigadores.
Mike fue encontrado muerto al pie de un acantilado sin lesiones físicas visibles en su cuerpo. Según los investigadores, no tenía huesos rotos, pero faltaban algunas de sus cosas, incluidas sus zapatillas para correr. Su bicicleta alquilada, sin embargo, estaba intacta cerca.
Meses después del trágico incidente sin una causa de muerte identificada, la familia finalmente recibió el cuerpo del chico solo para ser golpeados por otra conmoción.
El cuerpo era demasiado ligero a pesar de que ya estaba parcialmente descompuesto. Entonces, los padres del niño decidieron llevar el cuerpo a la Universidad Médica de Hannover en busca de respuestas.
Allí, volvieron a enfrentarse al horror. Según el padre, los médicos les dijeron que al cuerpo de Mike le faltaban: el corazón, los pulmones, el cerebro, el hígado, las glándulas suprarrenales, el páncreas, los órganos del cuello, la vejiga, el riñón derecho, el intestino delgado y el estómago.
Además, como reveló una autopsia realizada en Alemania, el cuerpo del adolescente fue embalsamado y no mostró signos que sugirieran que los órganos pudieran haber sido extraídos y comidos por animales.
Dos años después del incidente, los padres, que aún no tienen cierre, han presentado una solicitud a las autoridades para que vuelvan a investigar el caso.
Quieren respuestas a la misteriosa muerte.
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