Día a día la ciencia avanza exponencialmente, es por eso que muchas de las cosas que percibimos como “normales”, pueden cambiar radicalmente una vez que son investigadas por la ciencia.
Las relaciones sexuales son una parte vital y fundamental de la vida, por lo que su estudio, es siempre de interés científico y un reciente descubrimiento puede llegar a cambiar para siempre la forma en la que vemos el sexo.
Por lo general, se suele pensar que cuando una mujer y un hombre tienen relaciones sexuales sin protección, el único intercambio de ADN que puede ocurrir es el de un embarazo y que la única consecuencia puede ser una enfermedad de transmisión sexual. Si bien esto era cierto, en la actualidad se descubrió un fenómeno conocido como microquimerismo masculino.
Este fenómeno fue descubierto por científicos al estudiar el cerebro de las mujeres. En muchos de los cerebros analizados, los científicos encontraron ADN ajeno a estas, al estudiarlos con mayor detenimiento, notaron que no solo había ADN del padre de sus hijos (en el caso de que los tuvieran), sino que también había ADN de parejas sexuales previas, de las cuales no hubo embarazos pero sí, sexo sin protección.
El estudio, demostró que el 63% de las mujeres estudiadas poseían ADN ajeno en sus cerebros y que era el ADN trasmitido por parejas sexuales a través del semen. Estas células vivas, son absorbidas por el cuerpo femenino y alojadas, principalmente, en el cerebro.
Así que aunque parezca difícil de creer, cada pareja sexual que una mujer tiene, deja inevitablemente, una marca indeleble en su cuerpo.
Las consecuencias del microquimerismo masculino aún no se conocen por completo, sin embargo podemos estar seguros de que el sexo entre dos personas es algo mucho más significativo y deja marcas más profundas de lo que se piensa.
Estudio: journals.plos.org
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