Es evidente que uno de los matrimonios más admirados de Hollywood es el conformado por Emily Blunt y John Krasinski, sólo basta con apreciar la manera tan romántica en que se miran y como todo el tiempo se apoyan mutuamente.
Krasinski quien fue uno de los protagonistas de la serie “The Office” y Blunt famosa y bella actriz de muchas películas conocidas llevan una década de haberse casado, además de tener dos bellas hijas, Violet de dos años y Hazel de cuatro.
Daily Mail
Es muy curioso escuchar a Krasinski porque realmente rebasa lo cursi al hablar de su esposa, pero a él no parece importarle, una de las cosas que siempre menciona es que Emily es su “ingrediente para alcanzar el éxito”.
La profesión de ambos les exige mucho movimiento, constantemente tienen que trabajar en diversas locaciones, así que muchas veces pasan tiempo que están separados.
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Aunque Krasinski ha confesado que le es imposible estar lejos de su esposa y sus hijas.
El actor confesó a la revista People que piensa que sus hijas deben tener siempre una base junto a su madre, cuando ella se encuentre en grabaciones en diferentes lugares.
E! News
Señaló que:
“Siempre creamos una base, y siempre quiero que la base esté con su madre. Y haré el tiempo de vuelo“.
La revista le preguntó a qué se refería con “tiempo de vuelo”.
Esto quiere decir que tiene toda la disposición de trasladarse hasta donde se encuentre Emily cuando tenga tiempos libres y por eso siempre la alcanza, aunque esto signifique, como la última vez, viajar más de 9 mil kilómetros.
Marie Claire
En la última temporada, el matrimonio ha tenido una carga importante de trabajo, ya que mientras Emily grababa “Mary Poppins”, él estaba trabajando para la serie “Jack Ryan”, por lo que tenía que viajar de los Ángeles hasta Londres todos los fines de semana.
“Para mí la familia es algo innegociable. Así que, si soy sincero, estaba filmando a 6.000 millas de distancia de ellos, y volé todos los fines de semana“.
Zimbio
John declaró:
“Creo que no hay nada de lo que puedas quejarte en este negocio, ¿sabes a qué me refiero? Todos somos muy afortunados de estar haciendo lo que estamos haciendo. Si hay algo que es fastidioso, es que pasas tiempo lejos de tus hijos. Pero adivina qué, mucha gente pasa tiempo lejos de sus hijos. Entonces, para mí, creo que todos vivimos en un campamento de fantasía. Entonces no voy a ser el primero en quejarme”.
Esto si es amor del bueno ¿No crees?
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