El hombre quedó devastado por como la clínica uso su esperma.
El hombre de Inglaterra, dice que una importante clínica de fertilidad usó su esperma en contra de sus deseos para engendrar nueve hijos con parejas del mismo sexo y mujeres solteras.
Neil Gaskell le dijo a Care Fertility en Manchester, que se describe a sí mismo como “uno de los principales proveedores de FIV del mundo ”, que quería que su esperma fuera solo para parejas heterosexuales cuando aceptó convertirse en donante en 2010.
Pero los funcionarios de la clínica se vieron obligados a confesar que “se habían cometido errores ” cuando una auditoría oficial del regulador de fertilidad, la Autoridad de Fertilización y Embriología Humana (HFEA), reveló que cinco niños habían nacido de tres parejas del mismo sexo, incluido un grupo de gemelos, utilizando el esperma del Sr. Gaskell.
Al hombre de 49 años también se le dijo que era el padre biológico de 13 hijos en total, incluidos otros cuatro nacidos de tres mujeres solteras y cuatro más de parejas heterosexuales.
Gaskell, que acepta que sus puntos de vista serán divisivos, insistió en que cualquier hijo resultante de su esperma debería tener la ventaja de una figura paterna.
Un formulario de consentimiento oficial del donante dejó en claro las restricciones que deseaba imponer a su donación.
Como resultado de los errores, la clínica, que tiene más de 20 unidades en todo el país, ahora le ha pagado a Gaskell una suma de cinco cifras luego de una batalla legal de cuatro años que se resolvió fuera de los tribunales.
En una entrevista con un medio local ingles, Gaskell contó cómo:
La clínica usó su esperma para crear 11 familias cuando las reglas de la HFEA solo permiten un máximo de diez de un solo donante; La clínica le dijo que tenía ‘esperma de Superman’ y le pidieron que se convirtiera en donante para ayudar a otros.
También se quedó ‘conmocionado y aturdido’ al descubrir que había engendrado 13 hijos a través de la clínica cuando afirma que le dijeron que era más probable que fueran ‘dos o tres’ y que su esperma también se había utilizado para ayudar a las mujeres solteras a concebir a pesar de su creencia de que solo las “familias” con una figura paterna se beneficiarían.
Un cambio en la ley en 2005 significa que todos los niños tienen derecho a recibir información sobre sus padres biológicos, lo que significa que pueden ponerse en contacto con el Sr. Gaskell cuando cumplan 18 años.
La HFEA ha confirmado que la clínica nunca debería haber aceptado al Sr. Gaskell como donante porque sus puntos de vista eran contrarios a la Ley de Igualdad, que establece que los donantes y las clínicas no pueden “discriminar a los grupos protegidos”.
Hoy, el Sr. Gaskell, de Manchester, está furioso por lo que describe como una “gran traición”. “Acepto que algunas personas encontrarán esto incómodo y que la gente podría pensar que soy homofóbico o que estoy en contra de la idea de las madres solteras”, dijo a un medio local.
“Pero eso no podría estar más lejos de la verdad. No se trataba de discriminar a las parejas del mismo sexo, no era por razones religiosas y no acepto que sea intolerancia. Pienso en estas familias, estos niños, todos los días, todo el tiempo”, afirma.
“Pero no se puede discutir con la biología. Se necesitan un hombre y una mujer para crear un niño, y mi opinión es que si los niños nacen con mi esperma, deben tener una madre y un padre”.
“Me preocupaba cómo serían educados, si serían intimidados en el patio de recreo o si tenían dos mamás. No quería eso para mis hijos. Acepto que eso va a ser divisivo, pero así es como me siento”, dijo Gaskell a los medios.
La amarga ironía es que Gaskell y su expareja pasaron 14 años tratando de concebir antes de tener su primer hijo, luego de un tratamiento de FIV en Australia, en 2008.
Después de regresar al Reino Unido en 2010, decidieron intentar más y se acercaron a Care Fertility en Manchester. Cuando fracasó una ronda inicial de tratamiento de FIV, la clínica se acercó al Sr. Gaskell para que se convirtiera en donante.
A cambio, la clínica de fertilidad les ofreció a él y a su expareja un descuento en su próximo ciclo de FIV, una práctica común.
Si bien es ilegal pagar a los donantes de óvulos o esperma más que sus gastos, las clínicas pueden ofrecer descuentos en el tratamiento. En el caso del Sr. Gaskell, reduciría el costo de una ronda de FIV de £ 3,500 a £ 1,200.
El señor Gaskell dice que el director médico de la clínica en Manchester, Philip Lowe, le dijo que tenía “esperma con la fuerza de Superman”. “Explicó que su motilidad era inusualmente alta en comparación con los espermatozoides normales y que debería considerar convertirme en donante”, dijo Gaskell.
La pareja estaba ansiosa por ayudar a otras personas en una situación similar a la suya y decidió aceptar la oferta de la clínica.
Al completar el formulario de consentimiento de la HFEA en la clínica en abril de 2010, el Sr. Gaskell dijo que le dijeron que podía imponer restricciones a su donación.
‘La señora de la clínica, que llenó el formulario en mi nombre, dijo que algunas personas quieren poner “No para parejas del mismo sexo”. Así que le pedí que lo escribiera.
Debido a que el formulario también decía que la donación iría a un máximo de diez familias, asumí que eso significaba que iría a parejas, no a mujeres solteras.
‘Quería proteger la santidad de mi propia familia, mis propios hijos. Si los niños concebidos por donantes tuvieran una figura paterna, pensé que reduciría las posibilidades de que se pusieran en contacto conmigo más adelante.
‘Pueden tener una crianza fantástica y ser cuidados profundamente. Pero si tuvieran padres del mismo sexo o una madre soltera, otros niños podrían preguntar: “¿Dónde está tu papá?” Tendrían más curiosidad por mí.
De hecho, la Ley de Igualdad, que entró en vigor en octubre de ese año, prohíbe la discriminación contra grupos protegidos específicos, incluidas las parejas del mismo sexo.
El esperma del Sr. Gaskell solo se usó después de este punto, lo que, según la HFEA, significa que no debería haber sido aceptado como donante ya que sus restricciones infringían su propio código de práctica y la ley vigente en ese momento.
En septiembre de 2016, le dijeron al Sr. Gaskell que había 12 niños y que una auditoría de la HFEA había revelado que algunos habían nacido de parejas del mismo sexo.
Los detalles surgieron durante los siguientes meses y finalmente descubrió que el total era, de hecho, 13.
“Fue un cambio de vida, imposible de procesar. La traición a mis deseos realmente me atrapó, y la gran cantidad de niños ”, dijo.
“Llevaba 14 años creyendo que nunca sería padre solo para eventualmente tener mis propios tres hijos. Ahora me decían que tenía 13 más ‘.
La tensión destruyó su relación y la pareja se separó.
La clínica dijo: “Los errores son excepcionalmente raros y siempre se informan al regulador, además de informar a las personas afectadas de manera abierta, honesta y transparente”.
Un portavoz de la HFEA dijo que se había llevado a cabo una “investigación completa” sobre el caso de Gaskell y “se han aprendido lecciones”.