Sucedió en California.
Una de las hijas de 17 años logró escaparse y contactar a la policía.
Lo que encontraron los policías cuando entraron a la casa ubicada en la ciudad de Perris, al sur de California, fue espeluznante. Doce de los 13 hijos de una pareja estaban encerrados y atados a las camas. La mayoría, desnutridos. Una de las chicas se había escapado y fue clave para que se sepa el horror que estaban pasando. Sus padres fueron detenidos acusados de tortura.
La familia vivió en Texas antes de mudarse a California. Sus ex-vecinos rompen el silencio tras haber entrado a su casa.
Los esposos Louise Anna Turpin de 49 años y David Turpin de 56 años fueron detenidos en California, en la localidad de Perris, cuando las autoridades se percataron que maltrataban a 12 de sus 13 hijos. La familia vivió en Texas antes de mudarse a California. Las evidencias que han encontrado en sus residencias son sorprendentes.
David y LouiseTurpin durante una audiencia judicial.
Entre 1990 y 1999 esta singular familia vivió en Fort Worth. En el 2000 se mudó a 80 kilómetros al sur de esa ciudad.
Los vecinos no tardaron de calificar a la familia como gente “misteriosa”. Ellos mencionaron al diario Los Angeles Times (LA Times).
La casa tenía 4 habitaciones, 2 años, en un terreno de 14 hectáreas. La familia casi no salía de su vivienda, las persianas permanecían cerradas. Una navidad compraron 8 bicicletas y el sol las dañó, pues quedaron en el patio sin usarse.
El diario LA Times, ha intentado obtener más datos de la familia. Se sabe que una de las hijas mayores intentó huir de “la casa del terror” pero no logró hacerlo pues un vecino la llevó de vuelta a su “hogar”.
David tenía el pasatiempo de disparar a latas con su pistola, en el camino de entrada a su casa.
En una ocasión unos niños jugaron con los Turpin en un arroyo. Los Turpin no mencionaron sus nombres. Tiempo después se encontraron a los niños en la calle y unos de los hermanos Turpinmencionóa otro que tenían prohibido comunicarse con extraños.
Los Turpin utilizaban una camioneta y un Mustang para mover un contenedor de basura que se encontraba en su patio. De repente el contenedor desapareció, la basura comenzó a acumularse en un solo lugar y también en una casa rodante que les pertenecía.
Ricky Vinyard confesó al diario LA Times que una vez intentó hablar con la familia, que salió una mujer muy delgada y misteriosa, le mencionó que se dedicaba a talar árboles y le cerró la puerta.
Cuando la familia abandonó su casa. Billy Baldwin y su madre compraron la propiedad, ellos mencionan que:
“El interior estaba destrozado y el suelo del baño podrido”.
Además encontraron unas fotografías. En una se aprecia una cama con un riel de metal con una cuerda atada.
Cuando el nuevo dueño revisó la casa rodante se llevó otro gran susto. Menciona:
“Estaba hasta lleno de inmundicias. Había perros y gatos muertos.
También encontró a dos perros chihuahuas que sobrevivieron por comer lo que había entre la basura. La camioneta de la familia estaba repleta de pañales sucios y de latas de salchichas.El nuevo dueño mencionó:
“Quizás era lo único que consumían”.
Encontró excremento en la sala, también una habitación con pequeños escritorios decorado como un salón de escuela primaria.
Descubrió que en la casa “todo tenía cerraduras”: los armarios, un cofre de juguetes, el refrigerador, que además no había camas, sólo colchones y que toda la casa estaba llena de suciedad.