El sacerdote asegura que no tuvo nada que ver con el fallecimiento del pequeño, la autopsia demostró que se trató de un caso de asfixia.
“Ahora se encuentra con Dios”, indicó el cura.
Según las palabras de su familia, el padre Valentín no cubrió la boca del pequeño cuando lo sumergía en la pila bautismal.point 206 |
“Todos lo vimos, el sacerdote no puso la mano en la boca del niño como se hace habitualmente para evitar que el bebé trague agua”.point 120 | 1
“No podíamos creer que sólo lo agarrase por la barriga y por la cabeza para sumergirlo varias veces en el agua”, denunció el padre del bebé fallecido, Dumitru Gaidau.
Por otro lado, la madre del bebé, cuya identidad no fue revelada, informó que el pequeño “no podía respirar, su rostro se empezó a poner azul y comenzó a echar espuma por la boca”. Durante la situación y a la solicitud de la familia por detener la ceremonia, el sacerdote indicó que no podía interrumpir el ritual y volvió a sumergirlo en dos ocasiones más.
A pesar de la insistencia de los presentes, el sacerdote aseguró que no era el primer bebé que bautizaba y que sabía perfectamente lo que hacía. Luego de la tragedia, el religioso se desentendió de la situación e informó que el niño “ahora se encuentra con Dios”.
Pese a que el padre Valentín indica que cubrió la boca del menor y que el niño no falleció por su culpa, la autopsia reveló que había agua en los pulmones del bebé y que murió ahogado.
En caso de que las autoridades locales lo consideren oportuno, el religioso deberá enfrentar una condena de tres años de cárcel.
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