Después de 5 años intentándolo sin éxito, Aimee decidió hacerse a la idea de que jamás sería madre.
Pero un día, a las 22:00, su hermana la llamó por teléfono y pronunció las 5 palabras mágicas que cambiaron la vida de Aimee por completo, “Vamos a por tu bebé”. Shayna, que ya era madre de dos hijos, estaba lista para quedarse embarazada de nuevo, pero esta vez quiso que su bebé fuese para su hermana.
Cuando era pequeña le diagnosticaron una enfermedad intestinal que llenaba su abdomen con tejido cicatricial. No se dio cuenta de la magnitud del problema hasta que a los 21 años fue al médico por un dolor de tripa y descubrió que su útero podría haberse dañado.
Su médico le aconsejó quedar embarazada en ese momento si quería tener hijos ya que en un futuro probablemente no lo lograría.
Durante los 5 años que estuvo en tratamiento de fecundación in vitro, Aimee sufrió cuatro abortos y por ello decidió visitar a un especialista. Fue entonces cuando le dijeron que su útero era una “bola de tejido cicatricial” y que no podría tener hijos propios.
Después de hablarlo con su marido, Aimee se lo contó a su hermana, y esa misma noche fue cuando Shana se ofreció para ser ella la madre de sus hijos.
A Shayne le transfirieron el embrión producto de la fecundación in vitro y, durante los siguientes 9 meses, el bebé de Aimee fue creciendo dentro del vientre de Shayna. Las hermanas estaban más unidas que nunca, y sus respectivos maridos fueron un apoyo incondicional para ellas.
Cuando Shana se puso de parto, Aimee no se separó de ella ni un solo momento, agarrándola de la mano y ayudándola a traer a su preciosa hija al mundo.
Shayna dio a luz a una niña muy bonita y saludable y su cuñado Jake se acercó de inmediato a cortar el cordón umbilical. Shayna acurrucó a la bebé por unos instantes antes de entregársela a su mamá y a su papá.
La bautizaron como Francesca Louise Morrisby y, hoy en día, es una bebé de 8 meses muy feliz y con un gran futuro por delante.
Para ambas hermanas, compartir el nacimiento de Francesca, fue una experiencia verdaderamente increíble.