Cuando somos jóvenes es fácil dejar que la opinión de los demás afecte nuestra autoestima, a pesar de que seamos muy seguras, siempre un comentario respecto a nuestro aspecto nos puede incomodar, somos influenciables y algunas veces nos dejamos inquietar por las críticas.
Conforme vamos creciendo comenzamos a entender más sobre nosotras mismas, a madurar y a entender que los procesos de vida y nuestro aspecto físico va cambiando, entendemos que hay que ser consecuentes con nuestra realidad, nos damos cuenta que lo más importante es el valor de cada persona por lo que tiene dentro.
Es cuando nos percatamos que lo más importante es sentirnos bien, en armonía y ya no importa lo que opine la gente de nosotras. Pero también estamos abiertas a cambios, a sentirnos vigentes y bellas a cualquier edad. Esto lo sabe muy bien Kerry Grundhoefer, quien a sus 41 años decidió hacer un cambio en su aspecto pues necesitaba renovarse.
Entonces para llevar a cabo su plan buscó al estilista profesional Cristopher Hopkins, también conocido en el mundo de la belleza como “El hombre del cambio de estilo”. Kerry ya lo había pensado y se decidió a renovarse, dar un cambio total y sacar partido a su belleza.
Por mucho tiempo había ocultado sus canas con tratamientos y tintes que sólo maltrataban su cabello en un intento cansado por mantener el color que ya había perdido con los años. Además, esos tratamientos sólo implicaban muchos gastos.
Su cabellera en verdad era un desastre, lucía seca y muy maltratada por los tintes y tratamientos, incluso ya era muy susceptible a algunos productos químicos.
Fue por estos motivos que era necesario que se animara a un cambio que fuera más con su personalidad. Confiando en la experiencia de este profesional sabía que los resultados serían fabulosos. ¡Y así fue!
Sabía desde el principio que cualquier cambio que hiciera Christopher sería justo lo que ella necesitaría.
Al sentarse frente al espejo y dejar que Christopher pusiera manos a la obra, tenía la certeza de que deseaba cambiar su look a un corte de cabello corto.
Un cambio total y radical que hiciera verle más fresca. Ya no necesitaba la aprobación de nadie, sabía que estaba en lo correcto.
Cuando Christopher empezó, sintió muchos nervios pues tenía mucho que no se atrevía a hacer algo tan radical en su cabello.
Deseaba ver su nuevo aspecto y cuando miró su imagen no tuvo palabras para agradecer a Christopher, su esposo que se encontraba junto a ella estaba igual de sorprendido, le fascinaba ver a su esposa tan radiante.
Este fue el increíble resultado de Kerry.
Estancarse y conformarse es una actitud mediocre, siempre es bueno cambiar, renovarnos y tomar nuevas fuerzas, no dejar de sorprendernos y superar nuevos retos, nuestra autoestima lo agradecerá.
¿Qué te ha parecido el cambio que hizo Kerry? Siempre es bueno identificar cuáles son las cosas que nos favorecen y aprovecharlas ¿No crees?
Es bueno saber que aunque la edad va avanzando y nosotros vamos cambiando, siempre habrá algo que nos haga sentir bien y que además confirma que la belleza no tiene edad.
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