Traer un hijo al mundo es una gran responsabilidad y es una de las cosas más maravillosas que pueden existir, el milagro de la vida es algo único, aunque algunas ocasiones significa un gran sacrificio, pero al final siempre vale la pena.
Esto fue lo que vivió una pareja del Reino Unido conformada por Nicola y Mark Szymanowski. Ella de 38 años y Mark de 39, llevaban 7 años intentando tener un bebé.
La pareja residente de Manchester ya había invertido cerca de 20 mil libras en diversos tratamientos de fertilización in vitro sin ningún resultado. Un proceso tan complicado que ellos llamaron su “prueba física y emocional”. Durante ese proceso de 7 años, Nicola tuvo 2 abortos espontáneos. Estaban a punto de rendirse.
Incluso siguieron rigurosamente todas las indicaciones que les daba su doctora, la cual les pidió un cambio es sus costumbres y su estilo de vida. De pronto les pidió para poder obtener buenos resultados de fertilidad que Mark dejara sus clases de boxe y que ella suspendiera el uso de perfumes y desodorantes. Todo esto dio excelentes resultados porque finalmente la fertilización in vitro funcionó.
Estaba a punto de realizar su sueño de hacerse padres y todo por aquellas recomendaciones, la doctora explicó que todo ejercicio de alto impacto produce endorfinas en el cuerpo que trabaja hacia el sistema nervioso y los músculos, por lo que podría afectar el proceso de concepción.
También funcionó el hecho de que ambos dejaran de usar perfumes, sobre todo en Nicola, pues los químicos que contienen, incluso en los maquillajes entran por medio de la piel al torrente sanguíneo y eso intervendría en la fertilización.
Nicola comento al respecto:
“Incluso le pedí a las personas que me venían a visitar que no usaran perfume. Fue muy difícil, hubo momentos que estábamos muy tristes, pero a la larga logramos lo que queríamos, tuvimos a nuestro pequeño”.
“Después de intentar por mucho tiempo y de hacerme muchas pruebas de embarazo que daban negativo, fue en septiembre de 2016 que nos confirmaron el embarazo y en mayo de 2017 llegó a nuestras vidas nuestro pequeño Charles Henry John”.
De no haber recurrido a la fertilización in vitro, esta pareja, definitivamente no hubieran concebido un bebé. Aunque pasaron por momentos muy complicados y pruebas que superar como pareja, finalmente se convirtieron en padres de un hermoso niño.
Incluso llegaron a comentar que hubo momentos de tristeza e incertidumbre en que no querían ni hablar con sus amigos o que pasaban largo tiempo en la cama, se agotaban las esperanzas pero al final, gracias a su constancia lo lograron.
En verdad existen los milagros, por fin formaron una hermosa familia. ¡Esperamos que sean muy felices!
¿Qué piensas de este artículo? ¡Por favor deja tus comentarios debajo!
¡No te olvides darle like a la página para leer más notas como ésta!