Es difícil imaginarlo, pero hoy siguen siendo muchos los niños abandonados por sus padres en la calle.

Justo eso es lo que le ocurrió a un niño de seis años y su hermano, de tan sólo unos pocos meses de vida. Los dos se encontraron llorando en el borde de la carretera, después de haber sido abandonados por su madre durante la noche.

Esta historia tuvo lugar en Hanoi, Vietnam. Algunas personas que pasaban por la calle se sorprendieron al ver a un niño solo en la carretera y decidieron averiguar lo que estaba pasando. Al acercarse se dieron cuenta que el chico se aferraba a una caja en la que llevaba dentro un bebé envuelto en unas cuantas mantas. Lloraba pero mantenía sus brazos firmemente en la caja, protegiendo al más joven.

La madre les había dicho que regresaría a buscarlos en unas horas, pero jamás volvió.

La policía está investigando el caso y el servicio social les encontrará un nuevo hogar a estos dos hermanos.

 

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