Un hombre de Pensilvania fue acusado de causar la muerte de su bebé.
La bebé tenía solo 10 meses, abusó de ella sexualmente y no pidió ayuda médica; en su lugar buscó en Google cómo saber si estaba muerta.
Austin Stevens, de 29 años de edad, era un hombre dedicado al trabajo y a su familia, incluso era entrenador asistente de un equipo de fútbol. Pero, una llamada al 911 dejó al descubierto un aberrante crimen que dejó sin vida a su bebé de 10 meses dentro de su vivienda en el condado de Montgomery. Zara Lynn Scruggs, es descrita por sus seres queridos como una niña alegre que llenó de amor a todos.
De pronto todo cambio, a manos de su propio padre, quien la noche del pasado sábado 3 de octubre llamó a la línea de emergencias para alertar sobre una bebé que no respiraba. Los primeros en responder descubrieron a la pequeña luchando por su vida y de inmediato la llevaron al Einstein Medical Center Montgomery, donde falleció poco después de la medianoche.
Una autopsia confirmó lo que los doctores pudieron sospechar: la bebé fue víctima de abuso sexual. “Este caso es profundamente inquietante. Es difícil imaginar que la muerte de esta niña sea más traumática: la agresión sexual a un bebé, seguida de la inacción del padre para salvarle la vida, la llevó a la muerte”, dijo el fiscal del distrito de Montgomery, Kevin R. Steele.
Las autoridades descubrieron que Stevens tardó una hora en llamar al 911, ese tiempo lo invirtió en realizar varias búsquedas en Google, como: “Si un bebé deja de respirar”, “¿Qué pasa si no escuchas el corazón o los latidos del bebé”, “Mi bebé no respira” y “¿Cómo saber si un bebé está muerto?”.
Stevens enfrenta diversos cargos, entre los cuales destacan relaciones sexuales desviadas involuntarias y agresión agravada. Por el momento no enfrentan algún cargo por la muerte.
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