Científicos de distintas partes del mundo, han realizados alertas ante la primera evidencia clara de un raro síndrome que afecta severamente a niños, que estaría relacionado con el SARS-coV-2.
Causa una afección inflamatoria que podría ser fácilmente confundida con el síndrome del shock tóxico, aunque no presentan problemas respiratorios. Causa inflamación en los vasos sanguíneos del cuerpo.
Afecta con frecuencia a niños menores de 5 años y si se trata a tiempo, los síntomas ceden en unos días.
Los síntomas más frecuentes son: fiebre, ojos enrojecidos; erupción rosada en el abdomen, la espalda, los brazos y las piernas; labios rojos, secos y agrietados; lengua que presenta una capa blanca con protuberancias rojas; dolor de garganta; palmas de las manos hinchadas y plantas de los pies de un color violáceo, así como inflamación de los ganglios linfáticos del cuello.
Descamación de la piel de manos y pies, dolor articular, vómitos, diarrea y dolor abdominal. Si no se trata, los pacientes pueden tener complicaciones que pueden desembocar en aneurismas, inflamación del miocardio, arritmias, problemas con válvulas cardíacas, hasta ataques al corazón. Los síntomas tienden a desaparecer, sin embargo, muchos niños quedan sin energía y cansados.
Un estudio hecho en 7 niños ingresados en el hospital, entre el 27 de abril y el 9 de mayo, confirmó que presentaron la rara enfermedad varias semanas después de ser infectados con el virus.
Los niños dieron negativo en la prueba tradicional de coronavirus (PCR) practicada en adultos; no obstante, en la prueba de anticuerpos todos dieron positivo al SARS-coV-2. Los investigadores dicen que la única manera de identificar con precisión la presencia del virus en niños que resultaron negativos para la PCR y que padecen la condición hiperinflamatoria severa, que puede ser fatal, es por medio de pruebas de anticuerpos.
Se desconoce por qué el síndrome se desarrolla semanas luego de la infección, sin embargo, los científicos creen que puede deberse a una reacción exagerada severa del propio sistema inmune, dañando las células del cuerpo. El síndrome se ha denominado PIMS-TS, que significa: “síndrome multisistémico inflamatorio pediátrico asociado temporalmente con el SARS-CoV-2”.
La edad promedio de los niños estudiados fue de 9 años. Muchos mostraron síntomas de hiperinflamación, fiebre y al menos un síntoma gastrointestinal, y algunos signos de síndrome de shock tóxico. Seis requirieron ingreso en cuidados intensivos pediátricos debido a problemas cardíacos y la presión arterial baja provocada por dicha enfermedad.
La buena noticia es que todos mostraron signos positivos luego del tratamiento y desde entonces han sido dados de alta de la UCI. Chloe Knight, de 22 años de edad, reveló que su hijo de dos años, Freddie Merrylees, estaba “como un zombi”. El niño tenía una erupción en el cuerpo, temperatura alta, ojos rojos y luchaba por comer y beber.
Los niños con la enfermedad generalmente son llevados al hospital con fiebre alta que ha durado varios días y dolor abdominal. Los enfermos más graves pueden desarrollar síntomas parecidos a la sepsis, como respiración rápida y mala circulación sanguínea. Paralelamente, en Nueva York, 100 menores presentaron la misma enfermedad inflamatoria, que lamentablemente ha provocado la muerte de tres niños, según el gobernador Andrew Cuomo.
Se emitió una alerta dirigida a los padres de niños que se sospeche tuvieron el virus semanas atrás, y los síntomas a prestar atención son: fiebre de 38 grados por más de 24 horas, malestar que obligue hospitalización, marcadores inflamatorios en pruebas sanguíneas y evidencia de problemas en al menos dos órganos, que podrían incluir corazón, pulmones, riñones y piel.
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