¿Alguna vez te has fijado en el pequeño agujero que tienen las ventanas de los aviones? Por lo general, suele estar en la parte inferior de la ventanilla.
¿Será que tiene alguna utilidad?
El agujero del que hablaremos, se llama Breather Hole.
La ventana de un avión se compone de 2 láminas y 2 marcos para sujetarlas (el esquema es de la ventana de un Boeing 737, pero son prácticamente iguales en todos los aviones).
Esto se debe a que la lámina que da al exterior del avión se considera parte estructural del avión, por lo que su material es más gordo y resistente para soportar las tensiones provocadas por las presiones a determinadas alturas. Es la principal encargada de que la presión dentro y fuera de la nave no sean las mismas.
Dicho trabajo sería demasiado para realizarlo solo, por lo que se coloca un segundo panel, creando una cámara de aire entre los 2. Este espacio se encarga de regular la diferencia de presión entre el interior del avión y el exterior.
Este agujero, también evita la condensación y, por lo tanto, acumulación de vaho en el cristal exterior.
Además, regula la despresurización del habitáculo de los pasajeros en el improbable caso de que la ventana exterior se rompiese, logrando así una disminución de la velocidad a la que se despresurizaría el interior del avión y dando tiempo para poder aterrizar o disminuir la altura de la aeronave.
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