Saber que estás embarazada es el momento más increíble y emocionante para cualquier mujer.
La maternidad es un momento único en la vida, ya que una mujer se siente completa después de convertirse en madre.
Pero para algunas, se convierte en la experiencia más horrible que jamás podrán olvidar. Brooke, una madre de 27 años de Brisbane, California estaba muy emocionada ya que estaba esperando su segundo hijo.
Toda la familia esperaba ansiosamente al nuevo miembro de la familia. Pero a fines de agosto de 2017, todo cambió. Brooke sufrió una fuerte hemorragia, dejándola en una condición crítica.
Ella tenía 36 semanas de embarazo. Perdió 1.7 litros de sangre y el bebé no mostró signos vitales. Después de recibir las noticias, el esposo de Brooke, Elliot colapsó.
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