Las condiciones laborales se dan por sentadas cuando se trata de accidentes de montacargas.
Se demostró que los empleadores pueden esforzarse en crear áreas de trabajo más idóneas y asegurarse de que solo personal calificado pueda trabajar y operar con la maquinaria.
En septiembre Loren Schauers, de 19 años de edad, conducía una carretilla por medio de un puente cuando esta se volteó y cayó más de 15 metros al vacío, inmovilizándolo debajo del vehículo de casi cuatro toneladas de peso.
El accidente sucedió en Great Falls, Montana, USA, cuando el joven tuvo que moverse hacia el borde de un puente por otros automóviles que pasaban a su lado. A pesar del trágico suceso, Schauers estuvo consciente en todo momento.
Intentó saltar del montacargas mientras caía, pero su pierna quedó inmovilizada por el cinturón de seguridad. Podía ver su brazo derecho aplastado mientras la mitad inferior de su cuerpo permanecía atrapada debajo del vehículo.
Fue llevado a urgencias donde se le practicó una hemicorperectomía, es decir, perdió todo su cuerpo de la cintura hacia abajo. Era la única forma de salvarle la vida. Lejos de darse por vencido y su amor por la vida, Loren aceptó resignado someterse a la operación. Decidió que le amputaran la mitad de su cuerpo y seguir viviendo.
Por su parte, su novia, quien al momento del accidente tenía 21 años de edad, recibió aterrada la devastadora noticia de que no sobreviviría y se despidió de él en 6 oportunidades. Los doctores se dieron cuenta de que su pelvis estaba demasiado herida. También intentaron salvar su esperma para que pudiera tener hijos en el futuro, pero esto tampoco fue viable.
Pero, la pareja no se rindió y afianzó hasta el límite sus lazos de amor. Habían pasado juntos 18 felices meses de noviazgo, de modo que el accidente los aún más.
“No fue una decisión difícil que me amputaran la mitad de mi cuerpo; básicamente fue una elección entre vivir o morir”, dijo Loren.
Pasaban largas noches conversando, sintiendo, llorando juntos, sobre todo durante el primer mes de convalecencia de Loren en el hospital. Según cuenta Sabia, su primera despedida fue antes de la cirugía y fue la más sentida.
“La primera vez que nos despedimos fue antes de su cirugía, pero todavía tenía la intubación puesta, así que nos estábamos escribiendo porque no podía hablar. La noche previa escribió: ‘Te amo’ en una hoja de papel, ya que podría haber sido nuestra última noche juntos. Todavía hoy guardo aquella hoja de papel”, afirmó la mujer.
Su salud comenzó a mejorar drásticamente. Los médicos proyectaron unos 18 meses de estadía en el hospital, pero salió después de tres, con cuatro semanas en rehabilitación, antes de recibir el alta.
Recibió una compensación en metálico. Dice que quiere ser un motivador por medio de una plataforma que ofrece servicios de transmisión de videos en vivo. A principios de este año, Loren le propuso al amor de su vida que fuera su esposa. Sabia le dio el “Sí quiero”, llena de emoción. Planean casarse en su aniversario, el 17 de julio, en 2021 o 2022.
Deja tu opinión sobre el caso, y compártelo con todos.