Yulia Sharko, de 21 años de edad, intentó sacar a su hija de 2 años del auto por la ventana del asiento delantero.
La niña presionó sin querer el botón automático, cerrando la ventana y dejando sin vida por accidente a su madre.
La tragedia se produjo en Brest, suroeste de Bielorrusia.
El cuello de la mujer fue apretado por la ventanilla y estuvo así varios minutos hasta que llegó su esposo, Artur, que la encontró inconsciente y la liberó. La mujer fue llevada a urgencias, pero ocho días luego de estar ingresada, y sin recuperar la conciencia, falleció por los daños cerebrales que tenía.
“Su cerebro sufrió daños irreversibles debido a las arterias colapsadas”, dijo el médico.
El esposo de Yulia fue quien la encontró aprisionada en la ventanilla.
Dmitry Ivanyuk, del Comité de Investigación de Bielorrusia, dijo: “La joven venía de su fiesta de cumpleaños, que había compartido junto a su familia y sus amigos en una casa en el pueblo de Staroe Selo. Al llegar a su casa y estacionar su BMW E34 de color rojo se generó el impensado accidente.
Al llegar al hospital regional de Brest llegó en graves condiciones, con signos de asfixia mecánica y traumas”.
El Comité de Investigación, no cerró el caso y sigue examinando las circunstancias de la muerte de Yulia, que tenía otras dos hijas pequeñas: Margarita y Arianna.
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