Wang Gang, un padre que perdió sus brazos en un accidente a los 13 años de edad, por culpa de una descarga eléctrica, desafía todos los estereotipos asociados a su discapacidad al cuidar a su bebé de 10 meses.
Así lo demuestran las foto tomadas en la ciudad china de Tieling.
Este dedicado padre empezó a cuidar a su hijo justo después de su nacimiento. Wang Gang comenta que no es difícil para él jugar y alimentar a su pequeño, aunque salir a la calle con él puede ser un desafío y tiene que pedir ayuda para arreglar un portabebés.
Wang se encarga también de las tareas domésticas, usando sus pies para limpiar la cocina y transportar cubos de agua con la ayuda de sus dientes.
El padre comentó que el futuro de su hijo le preocupa mucho. “Me preocupa la situación financiera cuando mi hijo vaya a la escuela”, afirmó Wand.
Wand lamentó que la asignación básica que la familia está recibiendo ahora del gobierno no será suficiente en el futuro y espera encontrar una forma de ganar más dinero para mantener al pequeño.
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