No hay nada más horrible que perder a la persona que amas, especialmente cuando se pierde de forma abrupta, tal como lo vivió una mujer de Nueva York, en EE.
UU., llamada Maura Lewinger, quien perdió al amor de su vida a causa del Covid-19.
Por años, Maura vivió muchos momentos inolvidables al lado de su marido, Joe, quien le escribía hermosas cartas de amor cada mañana, en donde además de desearle un buen día, plasmaba los planes que tenía para su amada familia. “Él siempre me cuidó, me llevaba el café a la cama y me ayudaba en todo”, asegura Maura.
De un día para otro, Maura perdió a su marido el fin de semana pasado por complicaciones relacionadas con el Covid-19 y, al igual que otras familias, Lewinger tuvo que despedirse virtualmente de su esposo, por medio de una video llamada.
Debido a la rapidez con la que sucedió todo, Maura se rehúsa a creer lo que está ocurriendo y prefiere pensar que su marido está en el trabajo y que algún día volverá para seguir amándose. “En este momento, sin ver a nadie, a veces, se siente como si estuviera en el trabajo”, dijo Maura.
Joe trabajó en una escuela secundaria católica de Long Island, Nueva York, por 20 años. Fue subdirector y entrenador del equipo de baloncesto de la institución, por lo que siempre fue una persona saludable, sin ninguna enfermedad preexistente.
“Joe no tenía afecciones preexistentes y empezó con síntomas leves el viernes, como fiebre. Pero el 17 de marzo, día de San Patricio, su fiebre se disparó y comenzó a tener problemas para respirar”, comentó su esposa. Durante los días previos a la muerte de Joe, la pareja pasó las 24 horas del día, los 7 días de la semana, acompañándose por video llamadas. Maura intentaba hacerlo sentir tranquilo y amado, para que no se sintiera solo.
Sin embargo, cuando los doctores informaron a la mujer que la salud de Joe cada vez decaía más, ella suplicó que los dejaran verse por video llamada una última vez. Los médicos hicieron todo lo posible por salvar al hombre, lamentablemente, no fue suficiente, estaba al borde de la muerte. Maura puso su canción de boda de fondo y se dispuso a decirle adiós a su amor eterno.
“Le agradecí por ser el esposo más increíble, por hacerme sentir amada todos los días. Puse nuestra canción de boda para él y eso fue todo”, agregó la mujer. Cuando la canción terminó, hizo lo mismo el corazón de Joe. Perdió la vida, sumiendo en una profunda tristeza a su esposa y a sus tres hijos que siempre lo llevarán en su memoria.
Ante la pérdida, Maura pide a la gente que se mantengan en cuarentena y que piensen en todo momento que el Covid-19 es un peligro real al que estamos todos expuestos.
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