El amor nunca se desvanece, permanece por la eternidad.
El amor no es algo de lo que tengas dudas; solo sabes cuándo estás enamorado y cuándo no lo estás. Encontrar el amor es difícil, pero perder a ese amor es lo más difícil de superar.
Rosie Rechichi y su novio Michael Owens estaban completamente enamorados y llenos de felicidad cuando el destino decidió jugar en su contra.
Michael era un higienista dental de 23 años, tenía dolor de garganta y decidió visitar a un médico. Su mundo dio un vuelco cuando su médico le dijo que tenía leucemia mieloide aguda (LMA) y que además se encontraba en la etapa tardía de la enfermedad.
Rosie y Michael vivieron una relación a larga distancia durante el último año, pero tan pronto como se enteró del diagnóstico, Rosie volvió corriendo hacia él y no se apartó de su lado.
“Pasé la noche con él en la UCI y estuve acostada en la cama hablando y tratando de consolarlo”, dijo Rosie.
Comenzaron a hablar. Michael le preguntó si se casaría con él y Rosie dijo que sí sin siquiera pensarlo por una vez. Él le prometió que mejoraría y se casaría con ella tan pronto como se empezara a recuperar. Estaban muy enamorados y se sentía bien.
Pero 5 días después perdió la pelea contra el cáncer y falleció. La vida nunca será igual para Rosie. Que el señor la llene de la fuerza necesaria para seguir adelante.