Este hombre de San José aparecerá en el tribunal la semana que viene para enfrentar la acusación por matar a su ex novia a puñaladas y tiros, y después enviará por mensaje de texto fotos del cadáver a su actual novio, diciéndole: “Es demasiado tarde”.
Luego de escapar a México hace tres años, el sospechoso del asesinato Julio Pliego, de 46 años de edad, fue devuelto a las autoridades estadounidenses, después de nueve meses en proceso de extradición, según la Fiscalía del condado Santa Clara.
Pliego fue acusado de asesinato y tortura, por la muerte de Verónica Lozano, una estilista de 35 años de edad y madre de cuatro hijos. El sujeto tiene programado el inicio de su juicio el 12 de abril.
“Si el acusado creía que iba a vivir felizmente por siempre en México luego de cometer un crimen tan salvaje, estaba muy equivocado”, dijo la asistente del fiscal del condado Santa Clara, Katrina Ohde. “Esperamos que asuma las consecuencias de sus actos”.
Pliego se escapó a México el 15 de mayo del año 2013, horas más tarde, de que el cuerpo sin vida de Lozano fue encontrado en un cuarto rentado del San Jose Holiday Inn Express, dijeron las autoridades.
Ese día, el novio de Verónica intentó ponerse en contacto con ella por teléfono. Los abogados informaron que recibió una “respuesta terrorífica”. Pliego atendió la llamada y dijo que pensaba mandarle fotografías al novio de lo que le había hecho a la mujer. El novio de Lozano le pidió a Pliego que no le hiciera ningún daño.
Pliego respondió enviándole un mensaje de texto con una foto de Verónica la cual estaba desnuda y ensangrentada, dijeron los oficiales. Ohde informó que Pliego envió al menos una fotografía al novio de la víctima. Probablemente ella ya estaba muerta en la fotografía.
El novio de Verónica le suplicó a Pliego que la llevara a un hospital urgente. Sin embargo, los abogados cuentan que Pliego le dijo que: “ya era demasiado tarde”.
Un empleado del hotel consiguió el cuerpo de la mujer dos horas más tarde en el cuarto. Verónica había sido apuñalada más de 30 veces y recibió un tiro en la cabeza con una escopeta de corto rango, dicen los abogados.
En ese momento, los niños de Lozano tenían entre 5 y 17 años. Ella sólo había salido con Pliego durante unos seis meses y se habían separado dos meses antes de que fuera brutalmente asesinada.
No está claro si Pliego la acechó antes de asesinarla, sin embargo, algunas pruebas sugieren que él se le apareció sin avisar, agregó Ohde. Los investigadores del FBI rastrearon a Pliego hasta un área cerca de la Ciudad de México en julio del 2015.
Si lo declaran culpable del asesinato, Pliego enfrentará una condena de cadena perpetua.
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