Una trabajadora de una fábrica en Inglaterra, sufrió lesiones que cambiaron su vida después de ser arrastrada a una cinta transportadora, según su declaración en la corte sobre el accidente.
Kelly Nield recordó cómo estaba “tosiendo sangre” cuando sintió que el mecanismo la halaba, pero todos estaban tan ocupados que nadie notó el accidente.
Después de ser trasladada al hospital, temía que sus heridas fueran fatales y preguntó a los médicos: “¿Voy a morir?”.
La compañía propietaria de la fábrica en el norte de Gales, donde trabajaba Nield, fue multada por el incidente
La empresa se vio obligada a pagar aproximadamente £ 60,000 y cubrir los costos de £ 21,600 después de enfrentarse a cuatro cargos relacionados con el “horrible accidente” que tuvo lugar en abril de 2009.
En un comunicado, la señorita Nield, reveló el horror total del incidente.
“Estaba en estado de shock total, así que no podía sentir mucho dolor al principio, pero estaba aterrada”, dijo. “‘Sabía que estaba en problemas. Empecé a golpear el cinturón y a gritar pidiendo ayuda”.
“Estaba tosiendo sangre y pensando: ‘Oh, Dios mío, oh Dios mío’. Todo sucedió tan rápido”.
“La fábrica estaba ruidosa y nadie había visto lo que sucedia”
‘”Entonces mi amigo me vió y corrió a presionar el botón principal de apagado. Yo sentí que todo sucedía en cámara lenta.”
“Un trabajador corrió y encontró unas tijeras para cortar la bufanda, pero mi garganta inmediatamente comenzó a hincharse y no pude hablar”.
“Apenas podía respirar. Recuerdo que me sentí muy débil y con ganas de dormir. Más tarde seguí preguntando a los médicos: “¿Voy a morir?”
La señorita Nield trabajaba en la fábrica de perchas, cuando se inclinó para liberar algunas perchas que quedaron atrapadas en la maquinaria.
Su bufanda se enredó en los dientes de una cinta transportadora, que luego se arrastró por su cabello.
Mientras intentaba liberarse, su mano quedó atrapada en la máquina, atrapando su dedo meñique y casi cortándolo.
Después del accidente, sufrió lesiones graves en el cuello y la garganta, perdió gran parte de su cabello y se fracturó el dedo.
Nield fue llevada al hospital de la la localidad, donde permaneció durante tres meses mientras se sometía a una serie de operaciones.
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