Ver a un ser querido combatir el cáncer es desgarrador.
Aunque ahora ciertos tipos de cáncer son curables y avances médicos ocurren cada año, acercándonos a un mundo libre de cáncer; cuanto antes se diagnostique el cáncer, más fácil es curarlo.
A la madre de Julián Rios Cantu le diagnosticaron cáncer de mama por primera vez cuando él era un niño. Julián lo tomó como un desafío y se quedó al lado de su madre para luchar contra él. Sin embargo, la segunda aparición del cáncer l golpeó con fuerza, y se decidió a crear un dispositivo para salvar a las familias de pasar por el mismo dolor.
Julián fundó Higia Technologies con tres amigos, y ha presentado al mundo una solución que puede ayudar a detectar el cáncer de seno en sus primeras etapas. Julián ahora tiene 18 años, e ideó esta tecnología con el objetivo de detectar y tratar el cáncer a tiempo.
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La madre de Julián, aunque ha sobrevivido, perdió sus senos en la lucha contra el cáncer. Esta pérdida que sufrió su madre inspiró a Julián a diseñar el sostén de “exploración automática”.
A diferencia de los sujetadores normales, está equipado con más de 200 sensores que pueden estudiar el crecimiento y los cambios en el cuerpo de una mujer. Higia Technologies exhibió este sujetador en los Global Student Entrepreneur Awards y ganó una subvención de $ 20.000 dólares para continuar su investigación y hacerlo comercialmente viable.
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Con usuarios que usan el sostén durante 60 a 90 minutos cada semana, los sensores pueden detectar el flujo sanguíneo regular en los senos y su crecimiento.
Si hay algunas discrepancias en el color, la textura y la temperatura del seno, los sensores también pueden detectarlos.
Si hay algo de qué preocuparse, el sujetador está forrado con una aplicación que alerta a un profesional médico elegido por la mujer.
De esta manera, el cáncer puede diagnosticarse en su etapa de desarrollo, cuando todavía es tratable.
Julián y sus amigos sin duda merecen nuestros respetos y elogios por este invento.