Las largas horas que pasamos expuestos al sol, los malos hábitos alimenticios y la deshidratación, pueden provocar serias enfermedades en nuestra piel, incluyendo el cáncer.
El cáncer de piel es uno de los más comunes tipos de cáncer, sin embargo si es detectado a tiempo, el pronóstico es favorable.
Existen cambios constantes en la piel a los que hay que debemos prestar especial atención, entre ellos, los lunares.
Los lunares normales pueden ser planos o sobresalir un poco. La superficie por lo general es suave. Si existen cambios en tus lunares, pueden indicar el inicio de un cáncer de piel.
A continuación te presentamos 6 tipos de lunares a los cuales debes prestar especial atención.
Nevos displásticos.
Los lunares irregulares que son rojos, rosas o cafés. Tienen una forma irregular y la superficie puede ser suave o elevada.
Lunares asimétricos.
Si el lunar se divide en dos y no coincide un lado con el otro.
Los bordes son irregulares.
Los bordes no son planos, tienen irregularidades o se ven borrosos.
Un solo lunar tiene varios colores.
El tamaño del lunar es más alargado que una goma de lápiz.
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El lunar cambia de tamaño y forma con el transcurso del tiempo.
Si encuentras algún lunar irregular, no entres en pánico.
Tan solo acude al dermatólogo para que realice un correcto diagnóstico y descarte cualquier posibilidad de malignidad.
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Cabe resaltar, que este artículo sólo tiene fines informativos, y que en ningún momento debe ser considerado como asesoramiento, diagnóstico o tratamiento médico profesional. Nunca dejes de buscar asesoramiento médico.